Con una carrera fructífera en cine, en televisión, en la
música y en el mundo actoral que respaldan a Fernando Allende; el artista tiene
en la mente para festejar sus 50 años como artista, presentarse en el Palacio
de Bellas Artes como lo hizo Mijares, sin embargo la edificación cultural del país, se ha
encontrado cerrada ante la corrupción y amiguismo de la titular de la Secretaría de Cultura, de las
autoridades de Bellas Artes y del gobierno peñista, cuya prioridad no es la
cultura, en donde los artistas populares solamente son reconocidos en la casa
de mármol cuando llegan en cenizas ante un gobierno que solamente ha utilizado
al Palacio, para regalarle boletos de ópera a sus amigos.