Inés Gómez Mont desde
los quince años tuvo la inquietud de dedicarse a la comunicación, su mirada
estaba fija en la televisión y no en la radio, y siendo de una familia con
poder político y económico en nuestro país, fue que su padre le cumplió, lo que
él creía era un capricho, y la impuso como comunicadora en la cadena de televisión de Ricardo salinas
Pliego. La hermosa mujer de cabellera sensualmente negra, no veía su llegada a TV
AZTECA como un juego, se preocupó por aprender a redactar correctamente, hacer
voces, sumarse a una cabina, a calificar los contenidos que aparecían en
pantalla, entre otras cosas. El importante apellido de su familia fue de peso
para que primero, Pati Chapoy, la pusiera en el programa “Los 25 Más”, y más
tarde a cuadro, en el programa estelar
de la barra de entretenimiento que es “Ventaneando”, en donde desde sus
primeras emisiones, Inés mostró su cualidad de comunicadora que se engrandecía
junto con su belleza, hasta convertirse por méritos propios, en una carta
importante en la cnducción, por lo que AZTECA la mandó a reforzar los programas
deportivos más importantes. El crecimiento de Inés ya tomaba tintes
internacionales, lo que la encaminó a dejar TV AZTECA y trasladarse al canal
internacional y estelar de TELEVISA, en donde participó en los programas en
vivo, más importantes de la empresa, incluyendo el matutino HOY. Fue en Televisa
donde Inés perdió terreno ante tanta competencia, circunstancia que no había
experimentado ni le daba presión en TV AZTECA. La comunicación resultaba una
necesidad profesional para Inés pero no una necesidad económica, por lo que no
se afanaba en llenar tanta pantalla en Televisa, ya que no tener una actividad
asfixiante le permitía atender a su
familia al procrear muchos hijos, a pesar de su juventud. En el 2018 las cosas
cambian para el influyentismo en el país ante la llegada del presidente
izquierdista Andrés Manuel López Obrador, por lo que el prestigio empresarial y
en la abogacía que tenía la familia Gómez-Momt
comienza a ser cuestionado, hasta que después de una investigación por
parte de la FGR, se gira orden de aprehensión en contra del supuesto flamante
abogado Víctor Manuel Álvarez Puga, esposo de Inés, por lavado de dinero y crimen organizado,
y que arrastra en la responsabilidad penal a la propia Inés Gómez Mont, quienes
ante la orden judicial, optan por esconderse de la justicia. Se comunicó que la Organización Internacional
de Policía Criminal (Interpol) busca en más de 190 países a Inés Gómez Mont
Arena, conductora de televisión y filántropa mexicana, y a su esposo Víctor
Manuel Álvarez Puga, dueño de cooperativas y empresas, para que respondan a las
acusaciones en su contra. Por medio de las redes sociales Inés escribió el
siguiente mensaje público: “Cómo lo anticipé en un comunicado anterior, he sido
informada que autoridades están solicitando más órdenes de aprehensión en mi
contra. Ahora por asuntos fiscales por los que ya tenía acuerdos conclusivos
con el SAT y PRODECON.Estos abusos se suman a los reportados ayer y hoy
miércoles por la mañana en la prensa, que revelan la persecución de mala fe de
la que mi esposo y yo somos objeto. Destaco tres puntos reportados por la
prensa.Primero, que el Procurador Fiscal, el señor Carlos Romero Aranda, inició
un procedimiento penal en nuestra contra, aún y cuando no tenía facultades
legales para hacerlo. No estaba autorizado legalmente. De ese tamaño su sed de
persecución en nuestra contra.Segundo, el 10 de septiembre de 2021, autoridades
(desconozco cuáles) le mintieron a la prensa y al público diciendo que existía
una orden de aprehensión en nuestra contra. Simplemente no había tal orden en
esa fecha. Pero al parecer era más importante para esas autoridades que yo
fuera juzgada y condenada en el foro de la opinión pública.Tercero, el Juez
Zeferín Hernández, quien era consciente de la calumnia, días después se
convirtió en su cómplice y emitió la pretendida orden de aprehensión. Es
lamentable pues pudo habernos dado oportunidad de acudir en libertad para desmentir
cualquier imputación. Esa oportunidad ya no existe: El juez ordenó
encarcelarnos a una prisión de máxima seguridad.Aunque tengo mucho temor de que
estos abusos continúen, tengo fe en que la verdad seguirá saliendo a la luz y
nuestra inocencia quedará demostrada. Lo repito y lo sostengo: soy inocente y
esto es una injusticia.Me quieren callar, pero seguiré levantando la voz con
todas mis fuerzas”. Hacemos votos para que todo salga favorable para la
talentosa conductora y en apego a derecho, aunque podemos suponer que ante la
cultura que el sistema corrupto de anteriores gobiernos sembraron en el país,
existían conductas por parte de familias que se decían respetables, que se
veían normales como si se tratara de asuntos
de negocios pero llenas de ilegalidades,
que otros gobiernos, solapaban y daban como letra muerta. Lo lamentable será que esta situación pueda
colocar a Inés Gómez-Mont en el final de su carrera como comunicadora, lo que
lamentaríamos mucho, pero sin duda, también lamentaríamos que no se hiciera el
correcto cumplimiento de la ley con todas las consecuencias que esto pudiera
traer y por dolorosos que pueda resultar. Más en www.somoselespectador.blogspot.com