.

.

miércoles, 6 de noviembre de 2024

ADELA MICHA Y UN PERIODISMO QUE NO SIRVE NI PARA LOS PERROS

 











Le faltan reconocimientos de oro  que  la deteriorada esfera de la comunicación -que se autonombraba el cuarto poder- y que ahora no puede nada, le deba entregar a una comunicadora  tan nefasta como Adela Micha al pertenecer a su zoología. A esta aprendiz  que apareció en la lista de chayoteros junto con su maestro Ricardo Rocha, anotación que fue exhibida en una conferencia de prensa presidencial. A esta roedora del micrófono que rompió cualquier ética para  tenderle una trampa al aire  a René Bejarano en combinación con Víctor Trujillo en los foros de Televisa. Adela que no tuvo limitaciones para transmitir un linchamiento en vivo, que defiende a corruptos como Rosario Robles y a golpeadores del progresismo como Eugenio Derbez pero que recibe trofeos y  reconocimientos que  han sido rechazados por el propio ex Presidente de la República  Andrés López Obrador. Días  antes de que el propio poder judicial no tuvo otro remedio que reconocer de legitimas las reformas constitucionales que cambian su estructura, es que Adela había descalificado  de violatorios  de derechos humanos los cambios que se dictaron en la Constitución con los requisitos de validez necesarios para hacerlo, lo que exhibe la calidad profesional  de esta miseria  de la comunicación  direccionada, que sin mayor recato, también  buscaba material de archivo para recibir con oportunismo la muerte de la actriz Silvia Pinal que Micha ya tenía asegurada sin que  haya llegado a consumarse y que también  utilizó sus risas de cantina, para celebrar  el deseo de  la hija de Alex Lora, porque pronto muriera el presidente López Obrador de un avionazo como lo expresó en uno de los programas de Micha cuando estaba al aire. Y por el mismo corte y estilo de ella, aparecen  López-Dóriga, Pedro Ferriz de Con o Ciro Gómez Leyva, quienes al no existir competencia en un monopolio televisivo, resultaban los grandes periodistas sin que hubiera punto de comparación para menoscabarlos. Qué dirán ahora, los que siguen a Adela Micha y que  no dudaban de su nivel intelectual cuando les decía frente a un micrófono y como si fuera especialista en derecho, que las reformas al poder judicial en la constitución mexicana,  resultaban ser contrarias a los derechos humanos y que hoy son reconocidas por el propio legislador, por la propia  titular del ejecutivo y hasta  por el  propio poder judicial  ante  el exceso de su  análisis improcedente.